domingo, 29 de julio de 2007

Gacetilla de prensa



Por haber salvado a cientos de hombres, mujeres y niños de Brasil, Chile y Argentina durante las dictaduras de estos países.

El Pastor de la Iglesia Evangelica Alemana, Heinz Dressel recibirá el día 7 de Agosto de 2007, a las 17,30 horas, en el Salón dorado de la Cancillería Argentina la condecoración “Orden de Mayo al mérito en el grado de Comendador” por su larga trayectoria y compromiso en la defensa de los Derechos Humanos. También la Embajada de Chile otorgará al Pastor la distinción de Bernardo O´Higins, constituyéndose así en la primera ceremonia conjunta de dos países que comparten una historia común referida a la situación de los Derechos Humanos.

Con esta condecoración las autoridades argentinas, en un acto promovido por el Colectivo de Exiliados, quieren significar el reconocimiento a quién ha realizado la temeraria y difícil tarea de salvar presos y perseguidos políticos durante las dictaduras militares del Cono Sur (Argentina, Brasil, Chile, Paraguay).

El Pastor Dressel, de nacionalidad alemana y de más de 70º años de edad en la actualidad, condujo una institución (Ökumenisches Studienwerk) que desarrolló un Programa Especial con el objetivo de salvar a personas encarceladas o perseguidas, entre los cuales se encontraban muchos argentinos. Que de no ser así hubiesen engrasado el número de desaparecidos.

Para ello, el Pastor Dressel debió confrontar y abogar en su propio país para posibilitar la permanencia en Alemania y facilitar el acceso al desarrollo personal y del conocimiento de los exiliados en el marco de una cultura diferente y con no pocas situaciones adversas.

Esta tarea la realiza desde una clara posición respecto a los Derechos Humanos por la cual priorizó salvaguardar vidas independientemente de posiciones políticas, creencias religiosas o nacionalidades. Es de señalar que también desarrolló las misma tarea en pro de perseguidos de Asia y África.

Una de las tantas cualidades del Pastor fue su capacidad de visualizar las atrocidades y atropellos que los militares implementaban en esta región y comprender la complejidad de la época a la que hacemos referencia, sosteniendo una propuesta ambiciosa y arriesgada, acompañado en su odisea por un grupo de colaboradores, no dándose por vencido ante las dificultades que se le presentaban.

El Pastor ha volcado sus experiencias con el exilio en distintos escritos, y en la actualidad continúa impulsando acciones por los Derechos Humanos en instituciones de su país. Es también impulsor de los juicios que se desarrollan en Alemania contra militares y civiles protagonistas del genocidio en Argentina.

Es importante reconocer la oportunidad de concretar actos de esta naturaleza y de desarrollar diálogos francos y reflexiones colectivas que ayuden a completar la visión de una etapa compleja integrando también el exilio en el relato histórico.

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